Últimamente estoy leyendo bastante sobre fotografía y en particular sobre fotógrafas que podrían considerarse en cierto modo un referente.
No hay demasiados profesionales que, desde el punto de vista del retrato, estén interesados en las personas. Hablo de humanidad y de dar visibilidad a determinados núcleos de la sociedad que, por cuestiones estéticas, tendemos a esconder u obviar.

Hoy me he topado con 𝙅𝙤𝙘𝙚𝙡𝙮𝙣 𝙇𝙚𝙚 que ha estado haciendo retratos psicológicos durante más de 40 años.

Me ha llamado la atención su proyecto Sovereign en el que elabora retratos que hablan de la invisibilidad de las mujeres maduras y les devuelve en un maravilloso gesto, su relevancia en esta sociedad que las considera indeseables e invisibles.
Estos retratos de Lee reflejan la belleza, el impulso y la tenacidad con que contempla a las mujeres que capta.

La belleza, la fuerza y la resiliencia no están sólo en ese cuerpo “𝘱𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰” de 25 años que te venden las redes sociales: lo encontrarás en las historias vividas de las mujeres que te rodean, en su mirada ajada, en el cuerpo que ha vivido y sobrevivido a experiencias dolorosas.

Tenemos que aprender a mirar con otros ojos, los que nos aíslen de todo lo socialmente perfecto que se nos está imponiendo.

A dar el valor que merece tener nuestro propio criterio